El español anotó la mayoría de sus goles dentro del área, con la pierna derecha y entre los 60 y 70 minutos.
Llegó para ser mediocampista, pero Xabier Azkargorta lo puso como volante ofensivo y Juan Miguel Callejón se acomodó en esa posición, con la que se alzó con el título de máximo goleador del torneo Apertura 2014-15, pese que no es un delantero de área.
Son pocos los casos en el que un jugador, sin ser delantero, haya logrado ser el máximo anotador en su equipo; lo fue Limberg Gutiérrez en Blooming, lo hizo Sandro Coelho en The Strongest, también Pablo Escobar en el Tigre, ahora lo hace Juan Miguel Callejón en Bolívar quien tomó el reto de formar un tridente ofensivo peligroso con el boliviano Juan Carlos Arce y el ecuatoriano Carlos Tenorio.
Callejón demostró ser un hombre peligroso cuando ingresa al área rival, de los 15 goles que anotó, 11 los hizo en esa posición mientras que los otros cuatro tantos los consiguió con lanzamientos desde fuera del rectángulo.
Se puede decir que la pierna derecha de Callejón vale oro, 12 goles marcó con esa extremidad, mientras que los otros tres tantos los anotó de cabeza tras dos asistencias de sus compañeros.
Hablando de asistencias, 11 conquistas logró el español a través de ese medio, las otras cuatro fueron de tiro libre, una de penal. El ecuatoriano Carlos Tenorio fue su principal cómplice ya que le dio cuatro asistencias de gol, Juan Carlos Arce, Wálter Flores y José Luis Sánchez Capdevila, también aportaron con dos asistencias cada uno.
El estadio Hernando Siles fue donde más goles logró, seis en total; el "Jesús Bermúdez", de Oruro, fue otro de los escenarios donde más marcó con cuatro tantos; anotó uno en Potosí, Tarija, Sucre, Cobija y Santa Cruz.
El español fue más peligroso en el segundo tiempo que en la primera parte, marcó 11 goles en el complemento, en especial entre los minutos entre el 60 y 70 cuando explotó su artillería con cinco anotaciones.
EL OTRO CALLEJÓN TAMBIÉN ES CAMPEÓN. El Nápoles, donde juega José María Callejón, gemelo de Juan Miguel, ganó ayer la Supercopa italiana en Catar tras vencer al Juventus en la tanda de penales, en un partido de infarto en el que ambos equipo regalaron a su afición su mejor fútbol y en el que brillaron en el campo los argentinos Gonzalo Higuaín y Carlos Tévez, autores de cuatro goles.
Hicieron falta 120 minutos en el campo y ocho lanzamientos de penal para que los de Rafael Benítez se adjudicaran la segunda Supercopa ganada al Juventus, la primera fue en 1990.
12 goles anotados de pierna derecha, los otros tres fueron de cabeza.
11 anotaciones los logró mediante asistencias, las otras cuatro fueron resultado de tiros libres.
11 goles marcó dentro del área rival, los otros cuatro goles fueron desde fuera.
6 goles marcó en La Paz, la ciudad donde más celebró, en tanto que hizo cuatro en Oruro.
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