Llegó de España en 2013 y conquistó los corazones bolivaristas. Juan Miguel Callejón se convirtió en figura de la academia paceña, que logró el título del torneo Apertura de la Liga, del que finalizó como goleador con 15 tantos. El delantero dio su primera vuelta olímpica como futbolista profesional, luego de golear a Blooming (0-3) en Santa Cruz, en la última fecha liguera, en la que marcó un gol.
Bolívar se quedó con el título en la última fecha, ¿cuán inolvidable es para vos?
Lo bonito de esto es llegar precisamente a la última jornada con dos equipos luchando palmo a palmo por el título, eso hizo que la competición sea mejor, ya que todo se definió en el último partido. Ahora hay que pensar en las vacaciones porque nosotros los extranjeros queremos compartir con los de casa y disfrutar de este título.
¿En algún momento pensaste que se les escapaba?
Nosotros desde que nos pusimos primeros con un punto delante de Oriente (el clásico frente a The Strongest) supimos que solo teníamos que ganar para ser campeones. Oriente venía jugando bien y sacando los partidos adelante; sin embargo, nuestro objetivo no se desvió, siempre fue ganar y ganar.
Ese morbo que se vivió en la última fecha, porque estaban implicados los clásicos rivales, ¿cómo lo vivió Bolívar?
Fue complicado porque los clásicos rivales de los candidatos al título jugaban de local y podían definir la suerte, pero nosotros solo teníamos que ganar y de eso nos preocupamos para no depender de otro resultado.
¿Cómo hizo Bolívar para estar metido solo en el partido y no dejarse influenciar con otros temas?
Estar tranquilos, sabíamos que iba a haber ansiedad, muchos nervios, pero tratamos de mantenernos bien porque en la cancha uno se olvida todo. Lo que se quiere en estos casos es disfrutar del fútbol y en ese sentido Bolívar es un justo vencedor.
¿Te habías imaginado un ambiente como el que se vivió en el Tahuichi, donde tuvieron bastante apoyo?
Siempre uno se imagina estas cosas, este tipo de partidos. Uno como jugador está pendiente y sueña con estas alegrías y esta vez se dio, es una realidad.
¿Cuál fue la base del Bolívar campeón?
Siempre hemos sido un equipo completo y, sobre todo, muy competitivo. Nunca hemos perdido el orden y cada jugador al que le tocó ingresar a la cancha intentó hacerlo lo mejor posible; eso al final de cuentas se convirtió en una característica.
¿Queda como una mancha en esta campaña ese 5-0 sufrido frente a Sport Boys, el 21 de septiembre en Warnes?
Sí. Son partidos atípicos, cada encuentro que uno juega es una historia aparte, pero ahora hay que estar orgullosos de lo que se logró y aquella derrota queda en el pasado. Es un resultado que dolió en su momento; sin embargo, supimos recuperarnos hasta lograr nuestro objetivo, que va dedicado a la afición.
En lo personal es tu primer título en el fútbol boliviano…
Se nos escapó el título hace un año y de la forma que menos uno quiere, pero el fútbol es así, lo bueno es que da revanchas y hoy sí pudimos conseguirlo.
Esta temporada fue inolvidable para Bolívar, porque aparte llegaron hasta las semifinales de la Libertadores. ¿Qué aspectos fueron clave para ello?
Lo he dicho varias veces y tampoco hay que olvidarse de eso. Ha sido un año difícil pero que increíblemente valió la pena, porque históricamente Bolívar llegó a las semifinales de la Copa y este torneo es la guinda que le faltaba al pastel; al final se dio.
Para la próxima temporada, ¿hay algo que mejorar?
Sí, siempre hay que mejorar tanto colectivamente como en lo personal. Considero que en un semestre puede haber errores y partidos malos, pero debemos corregirlos al año y tratar de mejorar en todos los aspectos.
¿Qué importancia le das al hecho de haber sido el goleador del torneo?
Siempre lo he dicho, la importancia de ser goleador pasó a un segundo plano con el título porque yo nunca me consideré un goleador a pleno dentro del equipo. En el anterior campeonato tampoco hice muchos goles. De todas formas es un orgullo, quería lograrlo en un desafío por dentro, aunque lo más importante era que Bolívar sea campeón y eso estuvo claro siempre.
Por el título, por ser goleador y por llegar hasta semifinales en la Libertadores, ¿se puede decir que fue tu mejor año como futbolista?
Yo creo que sí, me fue muy bien en lo personal y colectivamente, puede ser que haya sido mi mejor temporada.
¿Hasta cuándo te quedás en Bolívar?
Tengo contrato con Bolívar hasta mayo de 2015 y siempre que he tenido algo acordado lo he respetado. De momento solo pienso en eso, en cumplir ese contrato y que todos sepan que en enero vuelvo a trabajar acá.
¿Estás completamente adaptado a La Paz?
Sí. Siempre que uno va a un país nuevo es complicado adaptarse y sobre todo a La Paz por el tema de la altura, pero ya llevamos un buen tiempo en esa ciudad y estamos muy contentos.
¿Qué fue a lo que más te costó acostumbrarte cuando llegaste a Bolivia?
Venir de Europa a una ciudad que uno no conoce, a un país muy diferente al mío siempre es complicado para cualquiera, pero sobre todo por la altura. Sin embargo, todo estuvo bien, siempre he considerado que uno puede estar mejor y para lograr eso es trabajando.
¿Tenés la ilusión de jugar en algún club grande de Europa?
De momento estoy bien aquí. Cuando uno está lejos de casa echa de menos su país, a los amigos, a la familia y, bueno, de momento estoy bien en Bolívar.
Tu mellizo, José María, triunfa en el Nápoles de Italia y vos en Bolívar…
Eso es muy lindo. Estoy superfeliz, siempre hablo con él y nos comunicamos seguido.
¿Por qué tomaron caminos tan diferentes?
Esto es fútbol, siempre es una incógnita y uno no sabe qué va a pasar el día de mañana. Nos formamos juntos desde pequeños, siempre estuvimos unidos y cuando los caminos se separan es muy doloroso, pero bueno, cada uno vive su momento, vive su vida y yo me alegro de cómo le está yendo actualmente a mi hermano.
En un momento dado dijiste que te gustaría ganar la Libertadores más que la Champions, ¿realmente es así?
Bueno, no dije precisamente eso. Yo dije que como nunca jugué la Champions y estaba jugando la Libertadores, pues me gustaría ganar la Libertadores, porque si la juego está claro que la quiero ganar. Lo más importante es estar bien, ser feliz y ganar títulos con el equipo que uno juega.
¿Qué tanto te favoreció tener a compatriotas tuyos como técnicos de Bolívar?, el caso de Miguel Portugal y Xabier Azkargorta, aunque Vladimir Soria también dirigió un tiempo…
Bastante. La culpa de que yo esté aquí la tiene Miguel Ángel (Portugal), él fue el que me convenció, el que me hizo hacer las maletas para venirme para acá; la etapa con él fue muy buena porque estuvimos a punto de ganar el título, la verdad que le deseo lo mejor
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