“Tenorio...Tenorio...Tenorio”, gritó el escenario, que casi se desborda cuando en la primera jugada del mundialista, estuvo a punto de superar a Carlos Lampe, con un remate que le salió apenas desviado.
El mundialista desde que llegó al país no deja de festejar y se consagró ayer bicampeón en el fútbol boliviano.
Tenorio no se convitió en el goleador de cuadro celeste (4 goles), en parte a sus lesiones, pero aportó a la ofensiva con su juego aéreo y también en defensa, ya que fue el jugador que se paraba en el primer palo y en muchas ocasiones no pasaba el balón por su imponente físico.
“Mi primer año acá (Bolivia) y obtuve un bicampeonato y tengo mucho para dar. Todos los bolivaristas se merecen este título”, dijo el “Demoledor” como es conocido en el ámbito futbolero.
“Lo unico que tengo son agradecimientos a toda la gente del país, no solo a los hinchas, me dan su apoyo en todos los partidos que me toca jugar”, dijo el jugador, quien recordó que a sus 35 años sigue dando vueltas olímpicas.
“Me ha pasado en todos los países donde me ha tocado jugar, gracias a Dios que todo ha salido a pedir de boca en Bolívar, desde que llegué me ha tocado festejar bastante, aún tengo mucho que dar a esta linda hinchada”, señaló el atacante experimentado.
En el campo de juego, se encontró con los más jóvenes del plantel, con quienes se fundió en un abrazo fraternal, “son mis pupilos, ellos son quienes son el futuro del fútbol boliviano”, dijo al lado de Leandro Maygua, Francisco Rodríguez, entre algunos.
Está recuperandosé de una lesión, ayer jugó a media máquina, por la necesidad que había de que pueda aportar con sus goles en la Academia, pero desde que ingresó al terreno de juego, causó preocupación en los jugadores rivales.
Al final, festejó de manera eufórica, dando besos a la afición que estaba en la tribuna, “estar en Bolívar es algo que quedará para siempre en mi corazón”.
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