“No está muerto, quien pelea”, es la frase que comienzan a repetirse en Bolívar para mantener la ilusión de conseguir el trofeo; no dependen de sí mismos, deben esperar un tropiezo de San José (49 unidades), líder del Clausura.
Destroyers atraviesa un mal momento en lo futbolístico, todavía corre el riesgo de perder la categoría, debe sumar en los dos próximos encuentros (Aurora y Universitario).
El rendimiento colectivo del club cruceño es de irregular para abajo, con mucha dificultad para marcar y sobretodo con pocas variantes en la ofensiva.
El entrenador de la Academia, el uruguayo Alfredo Arias, anticipó durante la semana que presentaría cambios y sorprendió con la presencia de Martín Smedberg, quien no tuvo muchos minutos en el campeonato, pero ayer no desentonó. Además, el charrúa Mauricio Prieto colaboró en la marca.
Bolívar no juega bien, le costó ayer demostrar superioridad, pero cuenta con Juan Miguel Callejón y Marcos Riquelme; cuando ambos están iluminados te pueden ganar un partido.
En el trámite del primer tiempo se generaron pocas ocasiones de gol.
Riquelme con un cabezazo luego de la asistencia de Callejón estuvo a punto de sorprender, pero el arquero Elder Araúz pudo contener el esférico (21’).
Cerca de concluir la primera parte, Smedberg inició la jugada en el mediocampo y cedió a Riquelme. El argentino eludió a dos defensores cruceños y asistió a Callejón, quien marcó sin oposición alguna (43’).
El segundo tiempo, Destroyers se adelantó en el campo de juego, arriesgó para igualar el marcador.
El argentino Bryan Schmidt tuvo a mal traer a Luis Gutiérrez y a Juan José Orellana. Sin embargo, de nada le serviría llegar hasta el fondo porque los centros no eran precisos.
Smedberg estuvo a punto de ampliar la diferencia con un tiro libre, el balón pegó en el travesaño (59’).
El DT Arias mandó a todos sus jugadores a retroceder para defender la primera victoria en suelo cruceño; con una línea de cinco en el fondo, con cuatro mediocampistas y solo con Riquelme en la ofensiva trataba de impedir el empate del local.
La velocidad de Riquelme ayudó para encontrar chances para el 2-0, pero falló cuando se encontró con Araúz (64’).
Por su parte, Destroyers mandaba la pelota a la área chica para buscar la cabeza de Jefferson Taváres, la deÁngel Cuéllar o Vítor Cruz. Todo fue despejado por Ronald Raldes y compañia. La jugada más clara del local llegó con un cabezazo de Carlso Duarte, que pasó por encima del travesaño de Laforia (80’).
El 2-0 llegó con una buena combinación entre Juan Carlos Arce y Riquelme, que nació en el mediocampo. El argentino se llevó la pelota, antes de enfrentar a Araúz asistió a Callejón, quien con arco desguarnecido dio tranquilidad al plantel de Bolívar (85’).
Paulo Apaza
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