Bolívar ya está ahí, a solo tres puntos del endeble líder The Strongest y a uno del segundo. Los tiene en la mira. Ayer venció con un 7-5 —resultado de un set de tenis— a Royal Pari y se acomodó a tiro de cazarlos.
A falta de mucho por jugar —12 jornadas más—, la Academia se ha metido en serio en la lucha por los primeros puestos y ojo que, como juega, está para dar el batacazo. Es cierto, fue candidato al título desde el comienzo, se mareó un poco en el camino, pero ahora está de nuevo firme en pos de ese objetivo.
Los tres puntos en juego ayer en el Hernando Siles eran vitales porque al frente estaba justamente uno de los rivales directos. Y Bolívar ganó el partido en los primeros 25 minutos, porque fue en ese lapso en el que hizo la real diferencia. A esas alturas ya ganaba 3-0 y no había ninguna discusión sobre su superioridad.
Royal regaló esa casi media hora. Se asustó. Se defendió a más no poder. Y Bolívar, con las armas que tiene y contundente como es, no dejó pasar la oportunidad.
El primer gol no tardó en llegar. La muralla por la que apostaba Pari no era tal y lo demostró Juan Miguel Callejón, a devolución de Leonel Justiniano, para poner el 1-0 a los 16 minutos.
Después Bolívar no tuvo inconveniente en hacer el segundo, William Ferreira de penal (23); y el tercero (28), otra vez obra del uruguayo. La zaga cruceña era un flan.
Lo que vino después del 3-0 es otra historia. El primer tiempo acabó 5-2. Saulo Guerra hizo los de Royal Pari (27 y 45), aunque entre medio, la Academia no dejó de ser efectiva en el arco rival con los tantos otra vez de Callejón (34) y Ferreira (38).
Lo bueno que tuvo Bolívar —entre lo mal que marcó atrás— es que los atisbos de reacción de su rival los cortó a tiempo y con goles. O sea, no permitió que su victoria, virtualmente asegurada desde la primera parte, corriera peligro alguno en ningún momento.
Como que en el complemento, Callejón hizo el sexto (15) seis minutos después de que José Luis Chávez había descontado de tiro libre (6-3). Y Marcos Riquelme hizo el séptimo (32), instantes después de que Jhon Jairo Mosquera, de penal, había acercado de nuevo a su equipo (7-4).
Royal Pari celebró también su quinta conquista (Guimmer Justiniano a los 47), aunque fue para disimular los siete que Bolívar le hizo. Y es que el resultado (7-5) es solo una anécdota. La verdad es que el equipo paceño fue futbolísticamente muy superior.
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