Con muchas esperanzas en la maleta, la tarde de ayer llegó a La Paz el entrenador argentino Rubén Dario Insúa quien a partir de esta jornada trabajará al mando de Bolívar que en menos de dos semanas debuta en la Liga y el próximo mes en la Copa Libertadores de América.
Insúa llegó con un objetivo claro a La Paz, quiere ser campeón en los torneos que le toca a Bolívar jugar este año, no le importa la diferencia que existan entre uno y otro, él quiere ganar todo lo que el club tenga al frente.
“Quiero ser campeón. El objetivo del club es ser campeón, para eso hay que trabajar con mucha humildad, con sacrificio y ambición.
Estoy seguro que el equipo pueda conseguir un logro esta temporada”, dijo el entrenador argentino a su llegada al aeropuerto de El Alto.
Esta será su segunda experiencia en Bolivia, en 2007 dirigió a Wilstermann en una regular campaña ya que estuvo por encima de la mitad de los equipo que jugaron ese año, sin embargo por algunas diferencias con los directivos decidió salirse del club y comenzó un nuevo reto en Ecuador.
“Creo que hay que empezar de cero, todo lo que ha pasado como lo que haya ganado alguien como jugador hay que dejarlo en el pasado, ahora es tiempo de mirar el presente”, agregó Insúa quien tiene como logros haber sido campeón de la primera versión de la Copa Sudamericana en 2002, con San Lorenzo, y se finalista de la Copa Libertadores en 1998, junto a Barcelona, de Ecuador.
“Lo importante es tener buenos jugadores y buen equipo de futbol. Lo demás (como jugar en La Paz) son factores secundarios”, agregó el nuevo director técnico de la Academia.
Para Insúa, el grupo que le tocó a Bolívar en la Libertadores, con Boca Juniors y Deportivo Cali como rivales, “es duro como todos los demás grupos”, sin embargo cree que será importante que el equipo se haga fuerte como local para de esa forma luchar por la clasificación en los cotejos que le toque jugar fuera de casa.
Sobre la salida de los futbolistas Damián Lizio, quien se fue al Botafogo, de Brasil, y Carlos Tenorio, quien retornó a Ecuador para jugar en Liga Deportiva Universitaria de Quito, Insúa señaló que son unas bajas consideradas, pero que ahora hay que trabajar en traer refuerzos que sean igual o mejores que los jugadores que decidieron marcharse.
Para finalizar, Insúa pidió a la hinchada celeste tener “mucha confianza porque estoy seguro que (al club) le irá muy bien”.
Ayer el primer plantel retornó al trabajo en su estadio Libertador Simón Bolívar, de la zona de Tembladerani, al primer día de labores asistieron 16 jugadores y fue dirigido por Rolando Crespo y Vladimir Soria.
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