Para el defensor de Bolívar Nelsón Cabrera, el que su progenitor del mismo nombre haya asomado a la sede de gobierno, lo pone muy contento, porque hechos como éste suponen una magnífica inyección anímica para seguir afrontando el día a día y volcar el trabajo individual en función de los objetivos del grupo.
Nelson Cabrera padre, de trato amable, de entrada exteriorizó el orgullo que siente por su hijo, el lungo defensor de la estructura titular que tiene la ‘academia’ paceña, y recordó tópicos que han quedado en la retina.
“En lo personal me siento muy orgulloso de tener un hijo como él, recuerdo que dormía con la pelota de pequeño, jugaba con sus amiguitos de colegio, en un principio era delantero ya después se volvió defensor”, dijo el padre del central celeste quien confesó que buena parte de su trayectoria en período de formación lo encaró en el club Olimpia. Está en el recuerdo su partida a Rumania, donde tuvo la oportunidad de jugar la Eurocopa, y después a China para después recalar en Bolívar, “otro club grande”, matizó el papá del defensor paraguayo que optó por nacionalizarse boliviano, y quien por cuyas condiciones estaría dispuesto a defender la divisa Verde.
Sobre el particular, opinó que sólo dependía de su hijo, y por ser Bolivia un país hermano, “está bien”, concluyó.
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