Wilstermann y Bolívar reeditarán un nuevo ‘clásico nacional’, será esta tarde (17:15) en el ruedo del estadio Capriles de la capital valluna. Un partido con muchos ingredientes y con una característica marcada, ambos equipos están embarcados en una carrera que –por ahora- los tiene como protagonistas importantes del certamen Apertura de la Liga. El rojo es cuarto, y el celeste con un punto más está en el tercer casillero (14-15) y a sólo cinco puntos del líder, The Strongest.
Las intenciones de los circunstanciales adversarios, como era de esperar, es no dejar pasar la ocasión para afianzarse en su propósito de seguir escalando posiciones y entrar en la discusión por el título de la temporada. El conjunto ‘aviador’, conserva aún la condición de invicto luego de ocho fechas, pero su puntuación se ha visto mermada por cinco empates en su haber, incluso jugando en casa dejó escapar unidades valiosas que provocaron el desajuste a sus intenciones en función a capitalizar más aciertos, y ahora ven como posibilidad el restañar su reciente empate con Universitario (2-2), y sobre todas las cosas hacer pesar su localía, aunque, vaya si no le fue mal jugando en casa, porque es ahí donde dejó escapar unidades valiosas con empates que salían a derrota, sus adversarios no eran precisamente los más pintados.
El respeto por el adversario, en ambos bandos es mútuo, sus entrenadores como jugadores, no ahorraron palabras para hablar de los atributos futbolísticos, de las individualidades importantes que el oponente tiene, y que por ello mismo se descuenta un lance de ida y vuelta. Una victoria, en cualquier caso, será como un salto con pértiga para alcanzar a los de arriba (The Strongest y Sport Boys), por tanto es fácil entender que tanto rojos como celestes no están para conceder licencias, y mas bien volcar todos sus argumentos a un fin común; salir victoriosos de una contienda entre rivales directos.
Los bolivaristas no se guardaron nada en la previa, la idea es ganar, porque el objetivo que se han trazado de comienzo es dar batalla para ungirse con el cetro en disputa, y sus más recientes presentaciones se transformaron en victorias dentro y fuera de casa, por tanto hay razones fundadas que los fundamentos futbolísticos que maneja ya están encarrilados para hacer crecer sus chances en un campeonato que ya está pisando las tres últimas fechas de la primera rueda del Apertura.
El dueño de casa, con sus propias tribulaciones, por no saber cerrar jugadas propicias para convertir, se encuentra con el reto de mejorar su producción.
Un choque dominical para estadio lleno, y con ingredientes que se han ido abonando en los últimos días, sobre todo por las afirmaciones del estratega wilstermanista, el argentino Juan Manuel Llop, cuando señaló que los arbitrajes dejan muchas dudas y que suponía que están favoreciendo a equipos que siempre están peleando por el título.
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