Bolívar careció de juego ofensivo para vencer a un Colo Colo que llegó al estadio Hernando Siles, con idea de ensuciar el encuentro y que al final le dio un buen resultado, ante la falta de personalidad del juez argentino Darío Herrera.
El cuadro celeste sumó ayer su segundo punto en el grupo 2, de la Copa Libertadores de América (1-1). De nada le sirvió el empate (1-1) que consiguió en condición de visitante ante el Delfín, en tierra ecuatoriana, porque se le hizo cuesta arriba la opción de llegar a los octavos de final.
Ayer, al cuadro local dirigido por el brasileño Vinícius Eutrópio le faltó mayor verticalidad, el juego por las bandas no se notó, debido que por la izquierda estaba Luis Gutiérrez en una especie de defensor central y con poca proyección por esa banda.
Para mala suerte, el español Juan Miguel Callejón, Juan Carlos Arce y Leonel Justiniano no tuvieron una buena noche. Los tres fallaron en los pases en el mediocampo, por lo que generaron poco.
Los ataques del Bolívar fueron previsibles con centro áereos para Marcos Riquelme que estaba marcado por tres defensores del Colo Colo.
La primera llegada de Bolívar se realizó con un centro de Mauricio Prieto para el remate de Callejón y el balón se estrelló en el travesaño (1’).
Desde el inicio del partido, el arquero Agustín Orión de Colo Colo perdió mucho tiempo para sacar de meta y derivó en la primera tarjeta amarilla.
Sin embargo, el árbitro Herrera no pudo apresurar a varios jugadores del cuadro chileno que simplemente vieron la oportunidad de perder tiempo.
El mediocampista Justiniano tuvo un remate de media distancia que llegó a las manos de Orión (10’).
Colo Colo no pasaba de la mitad de la cancha, el juego de Jorge “el Mago” Valdivia no incidió en el primer tiempo porque se la pasó resbalándose.
Cuando menos ideas tenía el local, apareció un centro de Diego Bejarano que pegó en la mano de Claudio Baeza que el juez Herrera cobró la pena máxima (35’).
Luego de varios reclamos de los chilenos, el delantero Juan Carlos Arce puso el 1-0, con una definición al costado izquierdo de Orión (38’). Una definición media rara.
El trámite del partido cambió porque el cuadro visitante tenía que buscar el empate.
Para la suerte de Colo Colo, el 1-1 llegó en un tiro de esquina que pasó toda la área chica para el delantero Octavio Rivero que remató fuerte (43’).
En el segundo tiempo, Bolívar buscó el tanto de la victoria pero con mayores imprecisiones y los nervios fueron notorios en los jugadores locales.
Los cambios de Eutrópio no cambiaron el trámite del partido y tanto Damián Lizio, Erwin Saavedra y William Ferreira no lograron cambiar el resultado final.
Colo Colo sumó un punto que le dará la opción de seguir en la lucha por llegar a los octavos de final, luego de caer en el primer juego ante Atlético Nacional (0-1).
Bolívar deberá hacer las cosas diferentes para mantener las chances de seguir en la Libertadores. La realidad le obligará a sumar en Colombia o en Santiago.
Paulo Apaza
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