Carlos Tenorio demostró la sencillez y humildad que lo caracterizan, al protagonizar un momento diferente y extra futbolístico en Tembladerani.
El delantero ecuatoriano le obsequió a “Doña Ceci” (que vende jugos de frutas a unos pasos del estadio de Bolívar) una licuadora, por ser una mujer “encantadora y luchadora” y que atiende casi todos los días al ex mundialista después de los entrenamientos, además de los jugadores celestes. “Que Dios me le de muchísimos años de vida, y que sigas progresando Ceci. Es una mujer luchadora, encantadora. Uno comparte todos los días acá y desde el primer día que llegué demostró su cariño hacía mí y hacía todos los jugadores, es una incondicional. Ceci te mando un besote grande ‘mami’, cuidate que vos eres una mujer que te mereces muchísimo”, expresó. Mientras que doña Cecilia Anara Mamani (de 59 años) expresó su felicidad diciendole al ecuatoriano que “lo quiero mucho, es como mi hijo, le agradezco mucho a él, y a todo Bolívar”. De esa manera, “Doña Ceci” expresó su cariño y agradecimiento a Tenorio y al resto de los jugadores.
A finales del año pasado, solo tenía un puesto donde también preparaba jugos de frutas, pero, con su esfuerzo y con una ayuda sustancial de los jugadores -que hicieron una cuota- pudó adquirir el quiosco que ahora tiene.
Además del cariño que recibe, Tenorio también tuvo este gesto recordando sus orígenes humildes antes de convertirse en un jugador profesional de mucho valor y éxitos.
“He sufrido mucho de pequeño, pero hay que saber salir adelante”, manifestó el ecuatoriano.
El delantero académico consideró que el buen momento económico que puede tener no es muy importante, porque “la fama, las cosas materiales son un tema secundario, porque a veces confunde a la persona. Yo creo que el día en que uno se vaya de la Tierra, no se lleva nada”, dijo en tono emocionado.
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