El delantero argentino Marcos Riquelme estará desde hoy a disposición del cuerpo técnico de Bolívar, al mando del español Beñat San José Gil, al recibir el alta médica luego de superar la lesión en la rodilla derecha, aunque le resta algo más de trabajo físico tras emplear cinco semanas para rehabilitarse.
El atacante expresó su deseo de estar ya en el campo juego, pero reconoció que necesita algo más de trabajo físico, por lo cual quiere aprovechar esta semana, con el fin de ser tomando en cuenta si así lo decide San José para el partido del fin de semana frente a Guabirá, en el inicio del campeonato Clausura 2017, o bien debutar ante la Liga Deportiva Universitaria de Quito, en el partido de vuelta de los dieciseisavos de la Copa Sudamericana, programado para el 2 de agosto en la capital de Ecuador.
“Sí, estoy contento porque ya puedo estar a disposición del cuerpo técnico, solo me falta ponerme bien físicamente, si bien el tema de la rodilla quedó atrás, solo me falta el trabajo físico para ponerme a disposición del cuerpo técnico lo antes posible”, indicó.
Consultado si está en condiciones de jugar ante los azucareros, Riquelme respondió que faltan algunos días para ese cotejo y “sería prematuro” hablar porque hay tiempo por delante para seguir entrenando. “Después de ese partido hay el partido por la Copa (Sudamericana), así que vemos a ver cómo se trabaja esta semana y qué dice el técnico. No me tengo que desesperar” y atender las “recomendaciones del cuerpo técnico y de los compañeros” para no forzar nada que pudiera ir en contra de su recuperación. Riquelme sostuvo que el partido en Quito es importante para el equipo y el club celeste, porque está en juego el pase a los octavos de final de la Sudamericana. “Nosotros tuvimos un resultado bueno con el 1-0 y no nos hicieron gol acá. Si les hacemos un gol allá les obligados a hacernos tres”, apuntó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario