En el aniversario 92 del club Bolívar hacemos un póstumo homenaje a una de sus figuras legendarias. El balompié nacional tuvo en la década de los 40 y 50, del siglo pasado, a un centrodelantero de características especiales. Su nombre era Mario Mena, valioso elemento, que por lo general demostró la regularidad en los encuentros locales e internacionales.
Fuera y dentro del país realizó jugadas excepcionales, conquistando goles para el club Bolívar y el seleccionado nacional. Jugador batallador por excelencia, derrochó energías en los 90 minutos de cada partido.
La institución celeste contó en sus filas con este valor indiscutido. Mena nació en la ciudad de Tarija, cuna de Wálter Orozco, Víctor Brawn, Chirisco Romero, Abdul Aramayo, Fortunato Castillo y tantos otros jugadores tarijeños que vistieron orgullosamente la emblemática casaca bolivarista.
Su trayectoria deportiva empezó desde muy temprana edad. Siendo un adolecente, sintió verdadera atracción por el popular deporte. Aprovechó los momentos libres para dedicarse completamente a esta actividad.
En su tierra natal estaba el plantel de Independiente, semillero de destacados jugadores como Víctor Brawn y el propio Mario Mena. El Chapaco jugó en ese plantel por varios años, hasta que Obrero Royal, otro cuadro tarijeño, miró las cualidades del excelente jugador, incorporándolo a su poderoso plantel. En el cuadro de los trabajadores, Mena cumplió destacadas actuaciones.
Tanto así que los propios directivos del lugar lo designaron delantero titular de la selección tarijeña intransferible.
El hábil centrodelantero empezó a querer al club Bolívar porque en esta institución jugaban sus paisanos Orozco, Romero y Gutiérrez. En sus momentos reflexivos, Mena no hacía otra cosa que pensar y anhelar el momento de vestir la casaca celeste.
Fue precisamente en abril de 1947 que Bolívar contrató al tarijeño. Los artífices de este acuerdo fueron Alfredo Peñaranda, Armando Gamarra y Mario Alborta, principales ejecutivos del club Bolívar. El directorio de esa gestión se propuso preparar un buen plantel, para lo cual consiguió los fichajes de Mario Mena y Víctor Brawn.
El 9 de abril de 1947 Mena debutó con la casaca bolivarista, ese partido correspondió a un encuentro amistoso con el club Ferroviario de La Paz, al cual vencieron por un 1 gol a 0.
Su estreno oficial en el torneo local ocurrió el 2 de junio de la misma gestión. Coincidentemente en ese partido debutó Víctor Agustín Ugarte.
Vieron este llamativo estreno 5.000 personas, aproximadamente. El plantel celeste ganó a Atlético Alianza por 1-0.
Para ese partido, Bolívar alineó de la siguiente manera: Vásquez, Ramírez, Palomeque, Baldellón, Santos, Meleán, Linares, Brawn, Mena, Orozco y Ugarte.
Asimismo, su primer partido internacional ocurrió en diciembre de la misma gestión. El plantel paceño sometió por 4-3 a Sport Boys del Perú.
En los meses siguientes, Mena poco a poco fue mejorando y afianzando su juego; estas cualidades fueron suficientes para su futura convocatoria al combinado nacional. El tarijeño participó en el XVI Campeonato Sudamericano, llevado a cabo en abril de 1949, en la República del Brasil. A la conclusión de este torneo extraordinario Bolivia ocupó un digno cuarto lugar.
Nuevamente en las competencias locales, un paso fundamental se dio en mayo de 1950 porque en ese tiempo se fundó el profesionalismo del fútbol paceño. Justamente en ese torneo el club Bolívar se coronó campeón.
Este premio lo consiguió la Academia luego de siete largos años de espera. El partido se llevó a cabo el 13 de mayo de 1951.
Bolívar enfrentó al representante de Litoral, al cual ganó por 3-0. Después del partido, caballerosamente los jugadores fabriles felicitaron a sus colegas adversarios.
Los jugadores que consiguieron este galardón fueron: Kramer, Huaranca, Vascones, Baldellón, Santos Miranda, Brawn, Ugarte, Mena, Puertas y Orozco. Sirve puntualizar que en ese partido se destacó Mena.
Poco tiempo después, propiamente de 8 de noviembre de 1953, Bolívar se hace acreedor a su segundo título. Mena participó de esta nueva conquista. Un tercer galardón en el que participó Mena fue el 24 de febrero de 1957. En ese año Bolívar se clasificó campeón en la ciudad de Cochabamba. Ganó al combinado de Aurora por 1 gol a 0.
De esta manera el volante tarijeño aportó con su juego a la obtención de tres títulos y un subcampeonato de 1951.
Su última convocatoria a un torneo internacional se produjo en 1959, en el XX Torneo Sudamericano de Fútbol que se desarrolló en Buenos Aires, Argentina.
En sus memorias deportivas "Mario Mena se refirió a tres jugadores que admiraba, uno era el Flaco Ledesma, jugador defensor que militaba en filas de Municipal. El siguiente fue Wálter Orosco, jugador extraordinariamente técnico; alguna vez, menciona, se lo comparó con Vicente de la Mata, jugador perteneciente a Independiente de la Argentina. Y por último se refirió a Víctor Agustín Ugarte, jugador técnicamente dotado”.
Al concluir su actividad deportiva se dedicó a la vida particular. Sin embargo, al descender el club Bolívar el año 64, fue convocado para ocupar un cargo en la institución celeste.
De esta manera aportó con su experiencia para el regreso del Bolívar al sitio del que nunca debió apartarse. Luego de este aporte a la institución académica Mena dirigió a Central Chuma por un lapso de poco tiempo.
Uno de los últimos homenajes que recibió en vida fue el 12 de octubre de 1965, cuando se jugó un partido amistoso entre Bolívar y The Strongest; ambos planteles empataron a dos goles por lado.
Momentos antes de empezar el encuentro, dirigentes bolivaristas homenajearon a sus más destacadas figuras que durante varios años vistieron la casaca celeste: Édgar Vargas, Mario Mena, Víctor Agustín Ugarte, Ramón Santos y Mario Alborta, quienes recibieron de manos de sus dirigentes diplomas y distinciones especiales por sus servicios prestados a la institución.
En resumen, fueron varios los compromisos que cumplió el tarijeño a lo largo de su vida deportiva. Siempre brilló como jugador regular, ya sea en el club Bolívar o en el seleccionado nacional.
De esta manera hemos puntualizado algunas particularidades de la trayectoria deportiva del recordado Mario Mena, que por lo realizado en su vida futbolística se ganó con propios méritos estar dentro de la vitrina de los emblemáticos jugadores que pasaron por la gran institución académica.
Su deceso lamentable ocurrió el 10 de junio de 2013.
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