"A nosotros el calor nos mata”, afirmó el director técnico de Bolívar, Beñat San José Gil, sobre las condiciones "adversas” en las que jugó su equipo en los últimos tres encuentros. El vasco aseguró ayer que cuando su elenco juega a las 15:00, en el llano, rinde de manera distinta de cuando lo hace en otro horario, "por el intenso calor”. Citó los ejemplos de Sport Boys, el jueves 23 de febrero, y Blooming, el pasado domingo. Ambos juegos se disputaron en tierra cruceña.
"La altura no la podemos cambiar, pero es una realidad que estamos sufriendo jugar en verano en Santa Cruz y más para nosotros que estamos viniendo de la altura. Esta última semana hemos jugado fuera de casa con mucha humedad y bastante desgaste y no queda otra que adaptarse ante esta circunstancia que te plantean los rivales”, dijo.
El reclamo de Beñat apunta sobre todo al horario inusual en el que se jugó el domingo el lance ante el cuadro cruceño (15:00), cuando habitualmente los partidos en Santa Cruz se lo disputan en horario nocturno. En lo que va del presente torneo, los académicos deberán jugar aun con Oriente Petrolero (16 de abril) y con Petrolero (14 de junio), ambos juegos en el llano en los que intentarán sacar unidades en procura de conseguir el objetivo de llegar al título.
Otra debilidad
No es la única preocupación que tiene el entrenador español. En el encuentro que tuvo ayer con los medios estuvo más autocrítico que de costumbre y resaltó que la gran debilidad que aún tiene su plantilla tiene que ver con pelota parada del rival, un mal que no ha podido remediar durante todo el ciclo que está al frente del club Bolívar, desde junio de 2016.
"El tema de la pelota parada es nuestra debilidad, hay que mejorar de forma urgente para no tener problemas en el futuro, ya que se nos pueden escapar más puntos. Ya habíamos mejorado en este tema, pero volvimos a caer en los despistes. No nos pueden volver a hacer tres goles en sólo dos partidos con esa clase de jugadas, es demasiado castigo para lo que pretendemos”, añadió.
A San José Gil se le consultó si las permanentes rotaciones que realiza en la zaga central van en contra de la mecanización de movimientos que pretende. El DT mencionó que "la rotación quita la continuidad que uno pretende para ese puesto. Estoy de acuerdo con que una pareja de centrales que tenga continuidad tendrá más entendimiento en los movimientos, pero en esta última semana tuvimos tres partidos en el llano y se precisaba tener rotaciones”.
Los celestes reanudaron ayer su tarea con un trabajo regenerativo que se cumplió en Tembladerani. El zaguero Ronald Raldes no estuvo presente, ya que el cuerpo técnico le dio un permiso especial.
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