Ronnie Alan Fernández trajo consigo varios sueños e ilusiones en este paso por Bolívar, en lo que fue la apuesta más cara de la era Baisa desde que se hicieron cargo del club.
El joven atacante chileno nacido hace 26 años en Viña del Mar está tranquilo, confía en lo que le puede aportar al club y apuesta sus condiciones. Aunque, para este presente, tuvieron que pasar varias cosas, mucho rollo tuvo que pasar.
¿Quién es Ronnie Fernández?, fue la pregunta que lanzó el periodista de Deportes El Diario, la respuesta del chileno no se dejó esperar: “buena pregunta, un joven que viene de la parte más austral de Chile, de Punta Arenas, que estuvo hasta tercero medio con la ilusión de llegar al fútbol y a los diecisiete años llega a Santiago Wanderers, hace las inferiores allí, tuvo un par de posibilidades en las selecciones juveniles, luego un par de equipos de la B de Chile, luego Wanderers, triunfé, luego tuve que ir Deportivo Cali y de ahí a Bolívar”. Por el carácter que tiene dijo que es de pocos amigos, “pero amigo amigos, soy un tipo muy cariñoso con la gente cercana a mi, amo al cien por ciento a mi familia”.
De su familia, dijo que no es de “cuna de oro”, “soy de una familia de esfuerzo, mi padre y mi madre se juntaron para lo que tienen hoy, su casa, sus bienes, no soy de una familia de tener, sí de una familia que me inculcaron los valores, de esforzarme mucho, de luchar por lo que uno quiere”.
En su caso, afirmó que tuvo que luchar mucho para surgir, que en Chile no es fácil llegar porque hay miles y miles de jugadores que tienen la misma ilusión, “contento de que cada paso que he venido avanzando y con mucho respeto para la gente que viene de atrás”.
Admiró de niño a Ronaldo Nazario o el mismo Ronaldinho y en cuanto equipos, le gusta la calidad del seleccionado chileno, pero que antes que todo, el trabajo es la base de todo. “Equipo que fui, pude aportar en base a mucho esfuerzo, he pasado por momentos goleadores, en Cali tuve otra función, ahora me toca aportar donde se me necesite, lugar donde he ido siempre he aportado”, acotó el atacante.
Confiesa que no aportó lo que quería al Cali, “me faltó tiempo, tenía un contrato de tres años, solo estuve seis meses y me vine aquí, pero hice todo por dar lo mejor de mi”.
Fernández se calificó como un jugador “no típico”, porque se mueve mucho en el frente del ataque. “Soy bastante quisquilloso de la mitad de campo para arriba, pero quiero ayudar al equipo, como sea”, explicó.
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